Quien más quien menos, a pesar de la distancia, y gracias a vuestros mensajes, me voy manteniendo a la actualidad de lo que pasa por España. Si bien la mayoría son noticias políticas (que me importan poco) y hay poco cotilleo (prensa rosa y demás), agradezco que me comentéis lo que pasa por esas latitudes.
Por ejemplo, sé que han aprobado (¿otra vez?) el retorno de los Papeles de Salamanca a Cataluña (¿y el resto?); sé que hay un nuevo Estatut; sé que Fernando Alonso ha ganado el mundial de Formula 1; en fin, me mantengo al corriente. Sin embargo, con sorpresa, el otro día tuve conocimiento, por la prensa china (la primera vez además que pude leerla, en inglés, claro), de algo que nadie me había comentado (¿cómo es posible?). Sabía que el Barcelona ganaba, que el Madrid a veces perdía (lo cual es casi más importante), pero lo que nadie me ha dicho es que ¡EL GETAFE ES EL LIDER EN PRIMERA DIVISION! Salvo una errata que no creo que cometieran, dicha noticia es la más sorprendente de cuantas haya leído en un tiempo. Y de rebote que me enteré. ¡Cómo deben estar en Getafe! ¡La ciudad de la universidad Carlos III! ¡Viva el Getafe!
Pero de otro tipo de noticias, o más bien de imágenes, es de lo que quería hablaros. Muchos me habéis preguntado cosas como qué comemos, dónde, cómo nos movemos, cómo escribo las únicas e inimitables crónicas, etc. Aunque nunca nadie me ha preguntado: ¿Qué imagen tenemos los españoles por esos países tan remotos? Pues a eso voy.
En general, lamentablemente, la imagen de España es la de sus equipos de fútbol. Pero merece que profundice un poco más, país por país, en lo que nuestros vecinos terráqueos conocen de nosotros.
TURQUÍA: Sin duda, como es lógico, el país que más sabe de nosotros. Por su propio interés, que más les vale, si quieren entrar en Europa (aunque a los austriacos les joda). En fin, que saben de fútbol y mucho: los más enterados se saben casi la alineación de la Real Sociedad, porque allí, al parecer, juega un turco. Saben algo de política; de las ciudades; incluso, algo de español, y no solo los vendedores del Gran Bazar. Así que se llevan un notable o bueno, aprobado alto.
IRÁN: Nos alejamos en kilómetros y conocimiento. Fútbol y poco más, aparte de que nos acusan (seguro que es cierto) de comprar azafrán iraní y venderlo como español. Con lo mediatizados que están (¿nosotros no?), poco saben más allá de que estamos en Europa y que les estamos intentando ayudar contra EE.UU. Pero, en general, la reacción a la respuesta «vengo de España» es súper positiva y acogedora. Como supongo lo es con otras nacionalidades, no nos engañemos. Son gente encantadora. Suspenso condicional.
TURKMENISTÁN: De las pocas personas con las que tuve contacto en ese país (la gente, atemorizada por el régimen semi-dictatorial, apenas se atreve a hablar con el turista), uno sabía mucho. Ni más ni menos que conocía bien a Juan Carlos (por el que parecía tener mucho aprecio), a Julio Iglesias (del que no sabía ninguna canción), y amaba el flamenco (cosa que demostró varias veces marcándose unos pasos). Si valoramos el conocimiento de España por el que tenía este señor (el dueño de la guesthouse), la nota es notable.
UZBEKISTÁN: En general, más preocupados por saber si eras americano (más dólares, más gasto). No tenían una imagen definida, salvo por la música. Ni más ni menos que Enrique Iglesias es nuestro embajador cultural en ese país. Lamentable pero cierto. Como ése era el único conocimiento, la nota no puede ser sino un suspenso claro.
TAJIKISTÁN: Si tenemos en cuenta lo que nosotros conocemos de ese país, no es justo juzgar con dureza el desconocimiento de esta gente sobre los españoles. Tampoco habrán oído muchas veces como respuesta «Spain» a la pregunta «Where are you from?» así que no les culpemos. Fútbol y poco más. Sin calificación, por respeto.
KYRGYSTÁN: Como muestra de ser un pueblo informado, o por lo menos el cuerpo policial con el que teníamos trato, lo que este país sabía de España era siempre lo mismo: toros y gente zumbada corriendo por las calles delante de ellos. Es decir, Pamplona y los Sanfermines, que fueron un poco antes de nuestra llegada al país. El pueblo llano, casi ni con el mapa delante, era capaz de reconocer a nuestro país, con lo que otro suspenso, pero no severo.
CHINA: Seguramente saben perfectamente dónde está. Y, seguramente, saben mucho de nuestra cultura (quiero ser positivo en esto), pero les importa tres rábanos demostrarlo. No les interesa o preocupa hacer amigos con el típico «ah, Spain, beautiful country, fútbol, toros…» Aquí, cuando te preguntan de dónde eres y respondes «Spain», sigue un silencio y rictus impasivo, que denotan el escaso interés que tienen en hacer amigos. Pues eso, suspenso y de los gordos, por idiotas.
TÍBET: Es imposible que gente que no sabe dónde está un pueblo a 20 kilómetros del suyo sepa dónde queda España ni cómo somos. Pues eso. Esperando que el gobierno chino haga un poco mas de esfuerzo por educar y alfabetizar a este pueblo (lo cual dudo). Volvemos a dejar en blanco la nota.
Y así están las cosas. Pasamos el tiempo teniendo que aclarar más veces de lo necesario que la tequila no es española y que el tango es originario de otro país distinto al nuestro. Espero que el vuestro lo paséis bien leyendo estas modestas crónicas sin pretenciones (¡ja!).
Publicado originalmente el 7 de octubre de 2005.